Tras el viaje a Turquía de sus hijos, Benjamín Vicuña se encuentra “agazapado, esperando su momento” para tomar una medida drástica contra la China Suárez, según reveló Guido Záffora durante El Diario de Mariana.
El detonante del enojo del actor habría sido un posteo de Suárez haciendo referencia a «adicciones», interpretado como una indirecta personal. A esto se suma que ella eliminó una publicación que lo llamaba “papá del año”, un gesto que incrementó aún más la tensión.
En paralelo, ya se están coordinando reuniones clave entre los equipos de abogados de ambas partes, y se especula que Vicuña no descarta presentar acciones legales, dependiendo de lo que surja en esos encuentros y de futuras decisiones de Suárez.
Mientras tanto, el entorno cercano de Vicuña asegura que él solo busca “proteger la estabilidad emocional” de sus hijos, y que está cansado de los gestos públicos de Suárez que, según interpreta, afectan la imagen paterna que intenta construir desde hace tiempo. El actor habría decidido no responder públicamente por ahora, pero sigue con atención cada movimiento de su expareja y analiza si una eventual denuncia por “violencia simbólica” podría aplicarse.