Nacho Castañares y Lucila “La Tora” Villar protagonizaron un intenso cara a cara donde repasaron su historia como ex pareja, desnudando virtudes y defectos con crudeza.
Él opinó: “La primera buena: habla mucho. Y la primera mala: habla mucho”, mientras que ella respondió: “Es cariñoso, muy de lo quinesico. Lo malo es que es un poco pendejo. Como virtud, también puse que es fiel”.
En el intercambio también admitieron que la relación tuvo momentos de mucha química pero también de desgaste: él dijo que ella no era “vengativa” aunque lo consideraba, y ella lo describió como alguien que “resuelve mucho”.
También salió a luz que, aunque la relación amorosa terminó, Nacho Castañares y La Tora Villlar mantienen una buena relación laboral. En una nota realizada en Miami donde ambos trabajan cubriendo el Mundial de Clubes, Nacho comentó: “Si estamos acá es porque estamos bien. Hablamos lo que teníamos que hablar”, destacando que supieron gestionar su vínculo incluso después de la separación.