A poco más de 15 años del estreno de Floricienta, sigue siendo aún una de las sitcoms infantiles más recordadas -y extrañadas-. De hecho, sus canciones suenan en las radios de todo el país y siguen estando rankeadas en Spotify dentro de las más escuchadas.
Nada de eso fue suficiente para que su protagonista, Florencia Bertotti, quiera quedarse en el éxito para seguir disfrutando de sus mieles. Una de las razones que esbozó en torno a su necesidad de parar, fue, justamente, ser única e irremplazable en el papel principal "No, porque fueron dos años muy intensos. Incluso después del programa seguimos con la gira. Aunque estábamos en equipo, recaía mucho en mí. No había reemplazo posible" afirmó la actriz.
No fue la única causa, la otra (y quizás la más importante) es que la intérprete dejó de encontrar al personaje en la composición que el guion planteaba, "En la ficción acababa de tener trillizos y no podía imaginarme a Floricienta como madre. Esa transición me parecía complicada de llevar. Pero en esencia, sentía que ya era suficiente. Más allá de aprovechar el éxito, llegué al punto en el que consideré que era el momento de parar".
Agradecida por todo lo que el papel le dio e incluso el cariño cosechado entre la gente a raíz del mismo -que se mantiene intacto hasta hoy-, Bertotti aprendió con la madurez de los años y de la carrera recorrida en el medio, que saber cuándo detenerse es tan importante como arrancar.