El Martes por la noche, el Rey Sol brindó una cena show íntima en Buenos Aires, a la que concurrieron fanáticos y famosos con un menú exquisito a cargo del exclusivo Hotel Faena. La disposición de las mesas, indicaba el valor de cada una de las entradas, cuanto más cerca del cantante, más caras. Todo venía viento en popa hasta que Luismi, en pleno show, hizo el gesto típico a sus fanáticas para que se pongan de pie. El problema fue que no solo lo hicieron, sino que además se acercaron al escenario y allí se desató el escándalo.
Relató Guido Záffora lo ocurrido, con lujo de detalles: “Cuando Luismi hizo un gesto que las fans entienden, ellas se empezaron a parar. Porque fue ‘vengan, vengan para acá’. Las fans que estaban atrás de todo se fueron para adelante, y las que habían pagado la entrada más cara no veían nada.” Luego agregó: “Entonces empezaron a los gritos, a los empujones. Me dicen que hubo un pogo, que fue muy incómodo el pogo porque había gente que estaba sentada, que quería disfrutar. Y porque aparte había mucha cogotuda, mucha gente con plata.”
Finalizó el relato detallando: “Cuando se van adelante las cogotudas que decimos que pagaron la entrada más cara estaban furiosas, y decían vayan así para atrás. Empezaron a llamar a los de seguridad. Pero la seguridad estaba desmadrada. Porque la seguridad no podía correr a la gente de atrás, porque la gente estaba parada.”, cerró el relato afirmando además que a Luis Miguel no le gustan este tipo de eventos porque la gente está más concentrada comiendo que viéndolo a él. ¡Qué escándalo!