Moria Casán evaluó el estado actual de Marcelo Tinelli desde su rol de observadora crítica: reconoció su trayectoria como conductor y su capacidad reconocida por muchos, pero advirtió que ya no atraviesa un momento en el que todos lo elogen. En una entrevista con Implacables, dijo que ya no es una persona “muy querida” entre sus colegas por la cantidad de críticas y reclamos públicos que enfrenta.
Habló de los problemas que se mencionan sobre Tinelli, como demandas de pagos pendientes por trabajos anteriores (Florencia Peña, Luisa Albinoni, José María Listorti, entre otros). Aclaró que ella no está reclamando nada, pero observó que la acumulación de esas denuncias le juega en contra en su imagen pública.
Moria expresó que nota un ambiente de desconfianza y rechazo entre los “famosos” hacia Marcelo: “En cuanto a que lo detestan, lo detestan… No lo quieren mucho, eso lo noto”, señaló. También dijo que, aunque sabía que el hombre tiene admiradores y parentesco/personalidades que lo respetan, percibe que muchos están “pensando cómo lo bajan, cómo lo matan”.
Finalmente reflexionó sobre lo complejo de su situación: dijo que imagina que se siente “castigado” por todo lo que surge, tanto lo real como lo rumor. “En este país… un día te comes el paisano, otro día te comes las plumas. Es un quilombo esto”, comentó, para cerrar su visión de que el desgaste mediático, financiero y personal lo obliga a enfrentar una tormenta desde distintos frentes.