El personal trainer y ex custodio de Ricardo Fort, saltó a la fama sin buscarlo cuando Marcelo Tinelli se propuso como objetivo, hacerlo reir. Corría el año 2010 y Tito se encontraba al costado de la pista principal del conductor más famoso de la argentina, cumpliendo funciones de cuidado personal del chocolatero rico Ricky Fort.
El ojo experto de Tinelli rara vez se equivoca y, efectivamente, Tito llegó al Bailando en 2011 logrando disputar el título a Noelia Pompa y Hernán Piquín; ganándose el cariño del público continuó su carrera en teatro y participó de Combate desde el 2014 al 2018.
Todo ello en paralelo con su profesión (y pasión) de personal trainer, la que nunca abandonó y sostiene hasta el presente de la mano de su pareja desde hace 24 años, Marcela Villagra. En algunas entrevistas a los medios, Tito expresó que no le preocupó que su carrera mediática se apague ya que, sostuvo "No me interesa hablar mal de la gente sólo para estar en televisión."
Ahora, sorprendió y preocupó a su público un posteo de los últimos días en el que declaró: “Terminó otro finde! Estoy cansado pero no terminó el round y menos la pelea. No sé cómo pero tengo que seguir. Siempre hay que pelear un round más.”
Fue su pareja, Marcela quien en diálogo con Poco Correctos por El Trece, aclaró: “No es nada que sea preocupante de familia ni relaciones. Es lo que nos viene pasando a todos, tenés que renegociar el alquiler, ver cómo viene el trabajo. Es más que nada lo que nos pasa a todos los argentinos. Nada grave. Él está laburando de trainer como yo, gracias a Dios siempre mantuvimos ese laburo.” ¡Afortunadamente, todo está en orden!